1

Búsqueda bibliográfica

Dra. Elina Serra,* Lic. Esp. Rose Mari Soria**

RESUMEN

La actividad profesional en las ciencias de la salud implica necesariamente el ejercicio de una práctica basada en la mejor evidencia científica disponible. Para ello es necesario no solamente el acceso a las distintas fuentes de información científica, sino también el conocimiento para realizar una búsqueda bibliográfica eficiente. Esta búsqueda parte de una pregunta adecuada que permite obtener información actualizada, suficiente y de buena calidad.

En este artículo se presentan las fuentes de información más relevantes, primarias y secundarias; se delinean los elementos básicos para establecer una estrategia de búsqueda, tales como los términos descriptores y los conectores. Se enumeran también los diferentes formatos correspondientes a los artículos científicos con sus características y los documentos denominados “literatura gris”.

Palabras clave: bases de datos, bibliografía, publicaciones científicas, búsqueda bibliográfica.


Cómo citar:

Serra ME, Soria RM. Búsqueda bibliográfica. Rev Enferm Neonatal. Agosto 2017;24:18-21.


Motivación para la búsqueda

En la actualidad, para poder desempeñarse profesionalmente en cualquier área de las ciencias de la salud, es imprescindible el ejercicio de una práctica basada en la evidencia.1 Para ello, es necesario contar con acceso a la información científica de calidad, de las fuentes acreditadas que se encuentran disponibles en las diferentes bases de datos. La búsqueda es hoy uno de los ejes de obtención del conocimiento y si bien la implementación de la misma es accesible, porque se realiza en forma electrónica, puede ejecutarse desde diferentes lugares e inclusive con dispositivos móviles. Este proceso tiene pautas precisas que guían e incluso tutoriales de los diferentes sitios para orientar al profesional novel.

Es imperioso partir de un punto preciso, con claridad acerca de lo que se necesita buscar.2 Este es el motivo por el cual la primera parte de esta sección, estuvo dedicada a la pregunta de investigación, dado que es fundamental para encaminar, delimitar y enfocar la búsqueda bibliográfica a fin de obtener la información que equilibre la sensibilidad y la precisión de acuerdo a la necesidad puntual.3 La adecuación de ese equilibrio es fundamental y depende del juicio del profesional, en virtud de que la sensibilidad está dada por la cantidad de información que puedo obtener sobre un tema y la precisión va en detrimento de la cantidad, pero incrementa la pertinencia.

En muchas ocasiones el hecho de no partir de una pregunta correctamente formulada, hace que rápidamente se desestime la búsqueda por no encontrar resultados o por encontrarse con información total-mente alejada del eje temático en cuestión. Si bien la búsqueda en sí misma no es un fin, es el vehículo para alcanzar el conocimiento de la mejor evidencia disponible para la optimización del cuidado.2 Es imperioso entonces, utilizar una sistemática para llevarla a cabo efectivamente.

Fuentes de información

Una vez planteada la pregunta estructurada hay que comenzar a buscar la información en las diversas fuentes, que son aquellos lugares donde están los datos de interés para la demanda puntual. Actualmente el número de fuentes es sideral; se clasifican según el tipo de formato (el más utilizado para la consulta es el formato electrónico) y el contenido, en fuentes primarias y secundarias.4 Las fuentes primarias son los artículos originales que aparecen en las publicaciones.

En las bases de datos se concentra gran cantidad de información que puede seleccionarse de acuerdo al tipo de publicación, al año o el período, al idioma, al género, estudios en humanos o animales y otros criterios.5 Las bases de datos más conocidas o más frecuentemente consultadas por profesionales del ámbito de la salud son PubMed, Lilac y Embase, que cuentan con tutoriales para quienes ingresan por primera vez o necesitan ayuda para el uso de ese recurso. El acceso a PubMed y Lilac es gratuito y a Embase es arancelado.

Las fuentes secundarias son documentos que sintetizan información con máximas garantías de fiabilidad, como las revisiones sistemáticas, que suelen ser de mucha utilidad para los enfermeros cuando es necesario resolver un problema emergente del cuidado.4 Una base de datos de fuentes de información secundaria es la Cochrane Library Plus, que contiene todas las revisiones sistemáticas en inglés y un gran número de ellas traducidas al español. Es indudablemente una de las principales fuentes de evidencia de calidad en salud que existe en castellano de acceso gratuito.

Estrategias de búsqueda

Una vez formulada con precisión y claridad la pregunta de investigación, la búsqueda de información a través de las fuentes electrónicas se realiza utilizando palabras clave o términos de búsqueda que son los que interpreta el idioma o lenguaje de la base de datos.

La mayoría reconoce términos en inglés por lo cual la búsqueda hay que realizarla en ese idioma. Si no se conoce el término en inglés puede buscarse en un diccionario de español e inglés, de acceso gratuito en línea, como es el Word Reference (www.wordreference.com). Cada base reconoce determinados términos que se encuentran previamente definidos en su lenguaje propio (tesauro) y pueden buscarse en el diccionario de términos con el que cada base cuenta. Para PubMed esos términos se denominan MeSH (Medical Subject Headings) y para Lilac se denominan DeCS (Descriptores en Ciencias de la Salud).

Como la base de datos no admite frases completas, además de los términos se debe usar conectores para unir dichos términos, que responden a la teoría matemática de los conjuntos, básicamente unen o excluyen.

Los conectores u operadores booleanos son AND, OR y NOT.

Por ejemplo, si busca:

Sepsis OR neonatal sepsis. La base identificará artículos que en su texto contengan el término sepsis, los que contengan los términos sepsis neonatal o los que contengan ambos (unión).
Sepsis AND neonate. La base identificará solamente los artículos que contengan ambos términos, neonato y sepsis (inclusión).
Neonatal sepsis NOT preterm. La base identificará los artículos que contengan los términos sepsis neonatal y excluirá todos los que se refieran a sepsis neonatal en prematuros (exclusión).

Los pasos a seguir para implementar una estrategia de búsqueda básica6 pueden resumirse de la siguiente manera:

1. Formular correcta y claramente la pregunta.
2. Identificar los términos o palabras clave de esa pregunta.
3. Combinarlos con operadores booleanos.
4. Obtener los resultados.
5. Guardar los resultados de la búsqueda.
6. Analizar esos resultados y evaluar la necesidad de una nueva búsqueda.

A través de la búsqueda se accede entonces, como se mencionó anteriormente, a fuentes primarias o secundarias de evidencia científica. De las fuentes primarias el formato más frecuentemente encontrado es el artículo científico.

 

Tipos de artículos científicos

El artículo científico es un texto académico que se publica en una revista dirigida a los profesionales de una determinada disciplina. El formato corresponde al contenido que se pretenda comunicar y no, como muchas veces se considera erróneamente, a una determinada “categoría” que implique un menor o mayor valor sobre el mensaje.

Todos los artículos publicados en revistas científicas poseen dos características que los transforman en una de las fuentes de información más confiables:

1. Son de fácil acceso para cualquier lector, de modo que es sencillo conocer los datos y procedimientos precisos que allí se presentan.
2. Las revistas de cierta jerarquía y de circulación mundial adhieren a recomendaciones de entidades internacionales que promueven la transparencia y el rigor metodológico.

A continuación se detallan algunos de los formatos más frecuentemente usados:7-8

Artículo original: da difusión, por primera vez, en una revista científica, a un trabajo de investigación completo.
Comunicación breve: presenta resultados preliminares de un estudio, el que trata sobre un determinado procedimiento o sobre una nueva enfermedad. Su contenido representa una novedad que se juzga necesaria poner en conocimiento de la comunidad científica cuanto antes.
Presentación de un caso o serie de casos: presenta uno o más casos novedosos, ya sea por su manifestación clínica inusual, por su respuesta inesperada a un tratamiento o por presentar una complicación poco frecuente.
Revisión sistemática: presentan, en un análisis conjunto, los datos de varios estudios de investigación sobre el mismo tema que son seleccionados con una determinada sistemática.
Actualización: presenta las novedades sobre un determinado tema.
Artículo especial: trata sobre un tópico de interés para los lectores (por ejemplo sobre distintos aspectos del ejercicio profesional o sobre alguna temática que afecta directamente a nuestra población de injerencia).

Todos los formatos hasta aquí mencionados son sometidos al proceso de revisión por pares antes de ser aceptados para su publicación. Ello garantiza, adicionalmente a los estándares de calidad de la revista en sí misma, un análisis de la validez de su contenido previo a la publicación.

Otros formatos no requieren ese proceso:

Editorial: expresa el juicio de un editor sobre un tema.
Comentario editorial: comenta un artículo de investigación.
Comentario: presenta la valoración profesional de un autor sobre un tema.
Comentario de un libro: presenta un libro de reciente aparición y lo comenta.
Carta al editor: expresa la opinión de un lector sobre un artículo recientemente publicado o un tema de actualidad profesional.

Existen otros textos académicos que no se encuentran disponibles por los medios habituales tales como buscadores de bases de datos bibliográficas. Esos documentos son denominados como “literatura gris” (también “no publicados”, “literatura menor” o “literatura informal”).9 Se trata de tesis, monografías, actas de congresos, proyectos, boletines, documentos impresos con una tirada limitada de ejemplares o insertos de productos, entre otros. Esta bibliografía, a diferencia de la publicada en las revistas científicas, no garantiza al lector un proceso previo de análisis o valoración del contenido por parte de un tercero.

Sin embargo, se trata de documentos del campo científico que pueden tener relevancia dependiendo del tema que se esté estudiando y de la ausencia de fuentes de datos respecto del mismo punto sobre las que sí puede garantizarse un determinado nivel de calidad. Es decir que se recomendaría consultar literatura gris cuando no haya otra información sobre el tema.

Otras fuentes tales como artículos periodísticos o libros no académicos (aunque traten sobre tópicos del campo de la ciencia) no se consideran en general válidos ni para fundamentar un trabajo de investigación ni para el abordaje inicial del tema ya que no se aplica en ellos el método científico y, por tanto, sus resultados carecen de validez metodológica.

La ciencia cumple un circuito circular en el que cada investigación, fundamentada por conocimientos previos, da como fruto conclusiones que serán la base de otras investigaciones. De allí la importancia de la lectura previa de fuentes confiables, para generar a su vez conclusiones válidas que sirvan de cimiento para el futuro.

* Doctora en Medicina. Pediatra. Investigadora de FUNDASAMIN-Fundación para la Salud Materno Infantil. Docente de la asignatura Investigación en la Carrera de Especialización en Enfermería Neonatal. Universidad Austral.
Correspondencia: meserra@fundasamin.org.ar

** Licenciada en Enfermería. Especialista en Enfermería Neonatal. Coordinadora de Enfermería de FUNDASAMIN-Fundación para la Salud Materno Infantil. Docente de la asignatura Investigación en la Carrera de Especialización en Enfermería Neonatal. Universidad Austral.
Correspondencia: rmsoria@fundasamin.org

 

Bibliografía

1. Rodríguez Campo VA, Paravic Klijn TM. Enfermería basada en la evidencia y gestión del cuidado. Enfermería Global. Octubre de 2011. [Acceso: 8 de junio de 2017]. Disponible en: http://scielo.isciii.es/pdf/eg/v10n24/revision2.pdf

2. Santos C, Pimenta C, Nobre M. The PICO strategy for the research question construction and evidence search. Rev Latino-Am Enfermagem 2007; 15(3):508-11.

3. Alonso P, Ezquerro O, Fargues IGJ, Marzo M, et al. Enfermería Basada en la Evidencia. Hacia la excelencia en los cuidados. DAE ed. Madrid, España. 2004.

4. Barderas A, Escobar G. Fuentes de información en Enfermería: buscando la evidencia. Rev. Enfermería Anestesia. Reanimación y Terapia del Dolor 2004;(12):44-7.

5. Subirana M, Solá I, García JM, Guillaumet A et al. Importancia de las bases de datos en la búsqueda biblio-gráfica. Primer paso para una revisión sistemática. Enf Clín 2002;12(6):296:300.

6. Iñesta García A. Webs y Buscadores en Ciencias de la Salud. Escuela Nacional de Sanidad. Instituto de Salud Carlos III. Ministerio de Ciencia e Innovación. Octubre, 2010. [Acceso: 8 de junio de 2017]. Disponible en: http://www.isciii.es/ISCIII/es/contenidos/fd-publicaciones-isciii/fd-documentos/Interweb2edvir.pdf

7. Day R. Cómo escribir y publicar trabajos científicos. 3° edición en español, Washington DC: Organización Panamericana de la Salud; 2005. [Acceso: 3 de junio de 2017]. Disponible en: http://www.bvs.hn/Honduras/pdf/Comoescribirypublicar.pdf

8. Huth EJ. Writing and publishing in medicine. 3° ed. Baltimore, USA: Lippincott Williams & Wilkins; Chapter: The content and format of papers. 1999.p.59-120.

9. La Literatura Gris. Formación Universitaria – Vol. 4 Nº 6 – 2011. [Acceso: 3 de junio de 2017]. Disponible en: http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-50062011000600001&lng=es&nrm=iso&tln g=es